"Los chamanes vieron que al momento de la muerte el oscuro mar de la conciencia tragaba, por decirlo así, la conciencia de las criaturas vivas a través del punto de encaje. También vieron que el oscuro mar de la conciencia tenía un momento de, digamos, vacilación al enfrentarse con chamanes que habían hecho un recuento de sus vidas. Sin saberlo, algunos habían hecho ese recuento tan minuciosamente, que el oscuro mar de la conciencia tomaba la conciencia de sus experiencias de vida; pero no tocaba su fuerza vital. Los chamanes habían descubierto una verdad gigan-tesca acerca de las fuerzas del universo: El oscuro mar de la conciencia sólo quiere nuestras experiencias de vida, no nuestra fuerza vital"
Don Juan Matus a Carlos Castaneda.
"Taller Zodiaco, el pulso de la vida"
Hace 11 años